El programa televisivo La Cornisa difundió imágenes de una propiedad de la familia Kirchner en la ciudad de Río Gallegos, donde se podría haber escondido dinero producto de la corrupción. En el informe mostraron que dentro de la inmobiliaria que manejaba Máximo Kirchner habían construido una bóveda.
Las imágenes difundidas por el programa televisivo serán aportadas a la Justicia por el conductor del programa, el periodista Luis Majul, junto con la abogada Silvina Martínez, asesora de la ex diputada Margarita Stolbizer y ex funcionaria de la Inspección General de Justicia (IGJ).
Será en el marco de la llamada «causa de los cuadernos», ya que la hipótesis planteada en el informe es que la supuesta bóveda dentro de la propiedad podría haber sido utilizada para guardar el dinero que varias declaraciones judiciales indicaron que se trasladaba en bolsos desde la ciudad de Buenos Aires a la provincia de Santa Cruz.
Las imágenes corresponden al inmueble ubicado en pleno centro de Río Gallegos, en la ex Avenida Roca, actual Néstor Kirchner, al 490/496, de 366 metros cuadrados y donde funcionó la inmobiliaria Sanfelice, Sancho y asociados en la que trabajó el hijo mayor del matrimonio Kirchner, el actual diputado Máximo Kirchner.
«La misma persona que hizo la bóveda de Lázaro hizo la de Máximo», denunció Mariana Zuvic, parlamentaria del Mercosur, en el programa.
«El video que adjuntamos muestra la bóveda que se encuentra en el interior de dicho inmueble. Se trata de un espacio que podría servir para guardar los millones de dólares y euros que se enviaban en aviones a Santa Cruz», señala el escrito que se presentará en el juzgado a cargo de Claudio Bonadio.
Majul y Martínez le recordarán al magistrado las negativas a entregar el inmueble en el marco de las medidas dispuestas por Bonadio en la causa conocida como «Los Sauces», donde las propiedades de la ex familia presidencial pasaron a ser administradas por un interventor judicial. Y lo relacionaron con la presunta bóveda cuyas imágenes se difundieron en el programa.
El informe mostró varias «dificultades» para acceder a la bóveda porque «una puerta común parece indicar que detrás hay una habitación», pero «al abrirla, una nueva puerta, esta vez blindada, impide el acceso».
De acuerdo con el informe, la bóveda está ubicada donde funcionaba la oficina de Máximo Kirchner y en las imágenes se pudieron ver siete muebles que bien pueden haber sido utilizados tipo estantes para apilar bolsos.
Fuente: clarín