La Unidad de Información Financiera (UIF) apelará mañana el fallo que favoreció con una falta de mérito a la expresidenta Cristina Kirchner en la causa contra Lázaro Báez por lavado de dinero.
El juez federal Sebastián Casanello había resuelto que no hay pruebas ni para procesarla ni para sobreseerla.
Pero el fiscal Guillermo Marijuan la había imputado en la causa y los querellantes de la UIF insistían con que fuera indagada y procesada. Ahora, la UIF buscará que la Cámara Federal revoque la decisión de Casanello.
El juez no desligó a la expresidenta de la causa, sino que ordenó una decena de nuevas medidas para seguir investigándola.
Según Casanello, no hay evidencia que demuestre que Cristina Kirchner participó de las maniobras de lavado que llevaron adelante Báez, sus cuatro hijos, Leonardo Fariña , Federico Elaskar y los otros 18 acusados que él envió a juicio oral.
Casanello solo citó a indagatoria a la expresidenta después de que se lo ordenó la Cámara Federal. Para Casanello, no había elementos que justificaran siquiera un interrogatorio como sospechosa.
Según el juez, el vínculo acreditado de Cristina Kirchner con esta causa tiene que ver con la génesis del delito: ella está acusada de haberle dado a Báez negocios espurios que le permitieron hacer la fortuna que después lavó a través de La Rosadita, cuevas porteñas, sociedades nunca declaradas y cuentas en el exterior. Cristina Kirchner aparece entonces en el «delito precedente» al de lavado, que ya investigó otro juez.
fuente LA NACION