«Vamos a tener fragilidad económica de acá hasta las elecciones». De esta manera, el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, vinculó las elecciones presidenciales con la tensión económica que se aceleró en las últimas semanas y que llevó el Riesgo País hasta los más de 1000 puntos básicos (pb) hasta cerrar, actualmente, en casi 970 pb.
Peña agregó en diálogo con La Cornisa (América TV): «Hasta que pase sus elecciones Argentina va a vivir en mucha volatilidad». En ese sentido, el funcionario macrista interpeló a la oposición a que diga sus planes económicos y particularmente, al referirse a Cristina Kirchner, afirmó que debe decir si «va a defoltear».
“Si los opositores dijeran ‘nosotros no vamos a defaultear ni a incumplir los acuerdos’, incluyendo la ex presidenta, pueden colaborar a reducir la volatilidad”, señaló. Y señaló: «No podemos tirar la toalla, para atrás no hay solución».
Marcos Peña, así, reprodujo en otras palabras el testimonio de Mauricio Macri, quien había dicho días atrás que el riesgo país sube porque «en el mundo hay miedo de que los argentinos quieran volver para atrás». En una y en otra declaración está implícita la figura de Cristina Kirchner.
En ese sentido, Peña analizó fragmentos de «Sinceramente», el libro de CFK: «Hay que reconocer de este libro que es lo que ella piensa: solo entra la victimización. Negar todo y ponerse a la defensiva».
Cuando le refirieron que CFK define en el libro como «caos» la gestión de Macri, el jefe de Gabinete contestó: «Es un intento perverso de confundir». Añadió: «Conciben la democracia de forma más autoritaria».
Este lunes entran en vigencia los «precios esenciales». A propósito, Marcos Peña rechazó que estuvieran haciendo «kirchenrismo con buenos modales». Y apuntó en referencia al ex secretario de Comercio interior: «No tenemos un (Guillermo) Moreno gritando con una pistola en la mesa».
fuente CLARIN