Producto de una negociación que llevó adelante en exclusiva Cristina Kirchner, el Frente de Todos tendrá en el Senado un bloque único de 41 miembros. Eso le garantiza un holgado quorum propio, gracias a la fusión con los aliados provinciales del Frente Renovador de la Concordia (Misiones) y del Frente Cívico de Santiago del Estero, que disolverán sus respectivas bancadas.
La conformación del futuro oficialismo quedó cristalizada ayer, tras una reunión de 29 senadores en la que quedó consagrado José Mayans (Formosa) como nuevo presidente. La vicepresidencia estará en manos de Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), cristinista ortodoxa de La Cámpora.
El anuncio de la nueva configuración quedó a cargo de Mayans. «Vamos a tener un bloque que va tener 41 senadores, un número importante, fundamentalmente para acompañar las políticas públicas de nuestro gobierno, que ha tenido un respaldo contundente de la sociedad», afirmó el senador formoseño.
El flamante jefe de la bancada peronista también confirmó que Claudia Ledesma, esposa del gobernador Gerardo Zamora, será la presidenta provisional del Senado y, por lo tanto, ocupará el segundo escalón en la línea sucesoria presidencial. Fue la moneda de cambio para que el Frente Cívico de Santiago del Estero se integrara al Frente de Todos.
La novedad más relevante fue la incorporación al oficialismo de los dos senadores del Frente Renovador de la Concordia. En este caso, el pago por la disolución de la bancada provincial será la elección del exgobernador Maurice Closs como vicepresidente segundo del Senado.
Los senadores santiagueños del Frente Cívico siempre jugaron con el peronismo. De hecho, sumaron sus firmas para que el Bloque Justicialista, que conducía Miguel Pichetto, se quedara, el año pasado, con dos lugares en el Consejo de la Magistratura. Tanto es así que uno de esos sitiales aún lo ocupa Ada Itúrrez, senadora que responde al gobernador Zamora.
Con la integración de Ledesma y José Neder al nuevo bloque peronista se dará la curiosidad de que los tres representantes de Santiago del Estero -el restante es Gerardo Antenor Montenegro- formarán parte de la misma bancada. Lo mismo ocurrirá con los senadores por Chubut, al unirse las bancadas kirchnerista y peronista.
Aunque no se anunció ayer, fuentes legislativas confiaron que la Secretaría Administrativa del Senado estará a cargo de María Luz Alonso, exdiputada por La Pampa y militante de La Cámpora. La Secretaría Parlamentaria, en tanto, será para el senador Marcelo Fuentes (Neuquén), cuyo mandato vence el 10 de diciembre.
La nueva bancada empezaría con la baja de José Alperovich (Tucumán), denunciado por violación y que presentó un pedido de licencia.
El nuevo reparto de poder peronista es una demostración de poder de Cristina Kirchner. Relegó sin medias tintas a los senadores peronistas que acompañaron a Pichetto cuando separó a los kirchneristas de la bancada peronista. El caso de Carlos Caserio (Córdoba), que podría partir al gabinete de Fernández, es el ejemplo más claro de ese castigo a los infieles.
fuente LA NACION