Horas después de dejar el penal de Ezeiza para pasar a un régimen de prisión domiciliaria, el exministro de Planificación del kirchnerismo, Julio De Vido brindó una entrevista telefónica radial donde calificó el gobierno de Mauricio Macri como «corrupto» y llamó a «avanzar contra las prisiones preventivas y en cómo se armaron las causas» por corrupción en contra de exfuncionarios kirchneristas.
De Vido le brindó una entrevista al flamante diputado nacional del Frente de Todos, Eduardo Valdés, que tiene un programa de radio los domingos por la mañana en la AM750, señal del Grupo Octubre, propiedad del sindicalista Víctor Santa María.
«Las prisiones preventivas siguen existiendo, hay que seguir diciéndolo, sino se naturalizan las situaciones», dijo De Vido. Y se refirió al exvicepresidente, Amado Boudou: «Amado, si bien técnicamente no está en prisión preventiva, lo está, porque todos sabemos que está preso por declaraciones falsas», sostuvo.
Y opinó: «Tenemos que avanzar, no solo con las prisiones preventivas, sino con cómo se armaron las causas. Hay que reiterarlo constantemente. Somos nosotros los que tenemos que decir que este gobierno ha sido el más entregador de la historia. No es corrupción en función de errores de algunos funcionarios, sino que ha sido un saqueo y un robo sistemático, con persecuciones como las que ha sufrido Cristina», lanzó.
«Hay que hablar en tiempo presente. Estamos presos Milagro, Amado, yo de alguna manera. Baratta esta con pulsera, está siendo controlado por dos tribunales», sostuvo, en relación a los distintos exfuncionarios K involucrados en causas por corrupción.
«Hay que hacerlo rápido, porque al primer tropezón, el primero contra el que van a ir es sobre Cristina, y sobre nosotros. A la vicepresidenta electa hay que protegerla de esta persecución y este desastre que ha sido armado», expresó.
Al comienzo de la entrevista, el diputado Valdes le había expresado su cariño: «Te queremos mucho, te abrazamos, tenés una mujer que es un torbellino, Julio De Vido», le dijo.
«Muy, muy buenos días», contestó De Vido. «La verdad es que lo más lindo fue el reencuentro. Esperamos que amaneciera, fue un lindo reencuentro, fue una etapa dura, difícil, para ella, para mis hijos. Pero hay muchas ganas y mucha voluntad de seguir militando y hacer los aportes necesarios para que el país, fundamentalmente a través de la herramienta transformadora que es el peronismo, pueda seguir avanzando», sostuvo.
Y siguió: «Siento una gran alegría, pocas veces en la vida me sentí tan feliz como ayer, más allá del dolor enorme que significa haber dejado a los compañeros que quedaron presos. Todavía estoy con la tobillera, pero la verdad es que es una cuestión menor en relación a otros compañeros, sobre todo de Jujuy, por supuesto Amado, que fue un gran compañero en los últimos 45 días», expresó.
Arrepentidos
Luego se refirió a los arrepentidos: «Hay compañeros que no se guían por la coerción de arrepentirse para entregarla a Cristina, y eventualmente, a mí también. Son gente de palabra», dijo.
Y denunció: «La cuestión con los arrepentidos es que les decían: ‘Si decís esto…’. Eran estructuras de mentira, armadas muy desprolijamente por secretarios y jueces, sobre todo en la famosa causa de los cuadernos truchos, donde se premiaba con la libertad, una libertad sucia, porque no hay peor prisión que la que te comete tu conciencia a hacer esto», añadió.
«Esto más allá de las declaraciones de los propios empresarios sobre cómo los apretaban para que nos entregaran a Cristina, y a mí, en contra mío. Esta es la parte más amarga, más negra de esta etapa, que no pasó», insistió. «Todavía hay mucha gente detenida, el caso de Amado».
La excarcelación
De Vido dejó el penal de Ezeiza ayer a las 3 de la madrugada y llegó a las 5.20 a su chacra en Zárate. «Está bien, llegó bien, está contento, estamos contentos», dijo su pareja, Alessandra Minnicelli.
De Vido fue excarcelado por el Tribunal Oral Federal 7, a cargo de la causa de los cuadernos, pero permanecerá detenido en su casa con un dispositivo electrónico de control porque, en otra de las causas elevadas a juicio, la de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio, recibió la prisión domiciliaria.
«Seguiremos peleando por la libertad de Julio definitiva», dijo Minnicelli a LA NACION. La defensa de De Vido reclama a la Justicia por el cese de la prisión preventiva, ya que el plazo de dos años de la preventiva establecido por la ley venció en octubre y tras ser una prórroga se apeló.
LA NACIÓN