El Banco Central (BCRA) resolvió extender la postergación de los vencimientos de las tarjetas de crédito hasta el final de la ampliación de la cuarentena , es decir, hasta el lunes 13 de abril, aunque remarcó que aquellos clientes bancarios que estén en condiciones de honrarlos en tiempo y forma deberán hacerlo.
Además, dispuso que hasta esa misma fecha tendrán plazo para pagar sus cuotas los deudores de créditos bancarios (prendarios, personales e hipotecarios) aunque, en caso de que no estén en condiciones de hacerlo para entonces, los bancos deberán aplazar el cobro de esa cuota hasta el final del crédito concedido «en las mismas condiciones en que fuera pactado y sin poder aplicar ningún recargo punitorio».
Esto supone que si el deudor debía pagar la cuota 20 de un crédito tomado a 36 meses, el vencimiento de abril pasará automáticamente a convertirse en la cuota 37 de esa financiación sin necesidad de que el cliente incluso lo informe.
«Esa reprogramación se activará directamente ante el no pago de la cuota», explicaron.
Las medidas forman parte una compleja normativa que se divulgará en las próximas horas para definir cómo seguirá trabajando el sistema bancario desde mañana, ya que lo dispuesto en la Circular 6942 (al disponerse la primera cuarentena) caducaba esta noche.
Contempla, por caso, que los bancos deberán reabrir sus sucursales desde el viernes aunque sólo estarán disponibles para atender pagos de «prestaciones de la seguridad social», es decir, jubilaciones, pensiones y los planes y refuerzos diseñados por la crisis derivada de la pandemia.
Esto quiere decir que las entidades seguirán sin atender al público en general, pero deberán tener habilitados en todas sus sucursales al menos un «buzón» para cursar pagos y una máquina preparada para la recepción de grandes sumas de efectivo, además de la habilitada para depósitos en general.
«La idea es que no se repitan inconvenientes para cursar este tipo de operaciones, como los que se comprobaron días atrás. Pedimos a los bancos se esmeren en eso porque varios no llegaron a habilitar equipos en este tiempo», explicaron a LA NACION en el ente monetario.
La norma (cuyos número se conocerá mañana) reconoce las dificultades que genera el aislamiento preventivo social obligatorio en la actividad económica, por lo que genera mecanismos de excepción para postergar pagos, en caso de ser necesario.
Y es terminante al dejar bloqueada toda posibilidad de que los bancos cobren intereses punitorios por esos incumplimientos, los que deberán ser refinanciados en las condiciones originalmente pactadas.
El capítulo de las tarjetas
En el caso de las tarjetas de crédito, cuyos resúmenes por los consumos de marzo comienzan a vencer ahora, el BCRA recortó del 55 al 49% nominal anual (lo que equivale al 4,1% mensual) la tasa máxima que los emisores pueden cobrar a sus clientes por financiar consumos no cancelados al cierre del resumen del mes.
Así, a quien no cancele el vencimiento, o no lo haga por el total, los bancos le deberán aplicar la tasa del 49% por el total o el saldo a refinanciar y no podrán aplicarles intereses punitorios si no lo cancela el mes siguiente.
Con todo, resta definir qué sucederá en esos casos con los límites de financiación, ya que los usuarios de tarjetas que se vean obligados a refinanciar por sus situación o inactividad derivada de las restricciones podrían quedar en adelante con su plástico invalidado para nuevos consumos en el mes siguiente. «Es algo que deberemos seguir analizando», reconocieron en el BCRA.
En relación con las tarjetas de crédito, además, según lo resuelto en las últimas horas por las administradoras de medios de pago Prisma y Firts Data -emisoras de las tarjetas Visa y Mastercard, respectivamente-, ya no será necesario exigir que se firmen los comprobantes de pago realizados con tarjetas de débito o crédito para intentar minimizar el riesgo de contagio del coronavirus.
Así se lo comunicaron ambas compañías proveedoras de terminales de cobro POS a sus clientes, los que incluso quedan exentos de requerir la exhibición del DNI del usuario de la tarjeta para reducir la posibilidad de contagio al hacer pagos por esa vía.
«Hemos adoptado la posición de acompañar las medidas impuestas con el fin de contribuir al cuidado de la salud de los usuarios y empleados del sistema», indicó Fiserv/FirstData, dueña de las marcas de terminales Clover y POSNet.
«Durante la vigencia del aislamiento social, no será requerida la firma del cupón, siendo necesario validar la identidad a través de la exhibición del DNI y el tipeo o transcripción de su número en el POS o voucher», remarcaron.
fuente LA NACION