Bajo una fuerte presión tendiente a dar con la reactivación del turismo en algunas localidades veraniegas pero con la dura realidad del COVID-19 que ilustra una curva de contagios que no baja en el interior del país, el presidente Alberto Fernández definirá en las próximas horas con los gobernadores un “esquema mixto” de continuidad de la cuarentena obligatoria.
No hubo anoche la usual videoconferencia del jefe de Estado con los gobernadores previa a la definición de una nueva fase de cuarentena ni se espera que la haya. El Gobierno viene dialogando en las últimas semanas con varios mandatarios provinciales del tema,
En la Casa Rosada dicen que en el nuevo período de aislamiento se buscaría combinar el reclamo de las provincias para abrir actividades turísticas al mismo tiempo que proteger el sistema sanitario en aquellos lugares en que no disminuyeron los contagios.
Si bien en el AMBA la intención de la Casa Rosada es avanzar hacia una flexibilización mayor que permita el eventual pasaje del aislamiento obligatorio al distanciamiento, en al menos 10 provincias la situación de pandemia se mantiene con una “meseta alta” y esto implicaría un severo inconveniente para flexibilizar la cuarentena.
En el listado de provincias que hoy están en la “línea roja” de coronavirus aparecen Tucumán, Santa Fe, Mendoza, Chubut, Santa Cruz, Córdoba, Salta, Neuquén, San Luis y Río Negro. En la mayoría los niveles de ocupación de camas de terapia intensiva se encuentra en el orden del 80% promedio y los casos de contagio no han bajado o en tal caso la curva descendente es muy leve.
En ocho de estas provincias se ingresó hace 14 días en el esquema previsto por el último decreto presidencial que dispuso la modalidad de distanciamiento social preventivo y obligatorio (DISPO).
“En el interior del país el virus se diseminó más allá de las ciudades, llegó a pequeños pueblos, y es razonable que eso ocurra mientras siga el tránsito de personas, porque como siempre digo, nosotros vamos hacia el virus”, detalló el Presidente en su última intervención hace 15 días para definir la nueva etapa de cuarentena. Esta idea no cambió demasiado y el escenario sigue igual en buena parte del interior.
En esa línea, Alberto Fernández, el ministro de Salud, Ginés González García; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y el resto del equipo evalúan que el aislamiento obligatorio en al menos 10 provincias se mantendría aunque sólo en aquellas localidades que tienen niveles altos de contagio. Se permitiría para esto que haya un flujo controlado entre una provincia y otra para el período estival.
Esta es una decisión que podría acordar Cafiero con cada gobernador ya que hasta ahora el transporte público de pasajeros entre provincias está limitado al personal “esencial”. Esto implicaría pasar de un esquema de turismo interno a un turismo interprovincial.
Ayer el ministro de Salud mantuvo una videoconferencia con más de 15 gobernadores para lanzar el programa “Impulsa” donde la Nación inyectará $5.000 millones para reforzar el esquema de telemedicina y apuntalar así los 4.100 centros de atención sanitaria del país. El Secretario de Equidad en Salud, Martín Sabignoso, explicó a Infobae que este programa ya permite atender a más de 100.000 enfermos de COVID-19 a la distancia y que se podrá potenciar en los próximos meses.
Reclamos provinciales
Según un sondeo que realizó Infobae por diferentes distritos, el panorama de COVID-19 resulta preocupante en ciertas provincias mientras que en algunas hay signos de cierto amesetamiento de los contagios que podría implicar una apertura regulada de actividades.
En Tucumán, el gobernador Juan Manzur logró controlar los casos en el interior de la provincia aunque en la Capital hay más de 600 contagios por día y el nivel de ocupación de camas de terapia es del orden del 80%. Hay hasta ahora un total de 52.968 contagios y el incremento de casos es de más de 500 casos por día.
Salta presenta un panorama similar al de Tucumán donde en la capital hay decretado un aislamiento social obligatorio que se mantendría ya que los niveles de contagio no han bajado y los niveles de ocupación de camas son del 70%. Con 19.300 casos de COVID Salta se encuentra en una situación complicada en su capital aunque en el resto de la provincia los niveles son normales y el gobernador Gustavo Sáenz reclamó una apertura de actividades para reactivar el turismo en el verano.
El gobernador Omar Perotti en Santa Fe está realizando aperturas de actividades en algunas localidades aunque los allegados al mandatario santafecino admitieron ante Infobae que “no hay mucho margen” para cerrar mucho más la economía local.
De todas maneras, el panorama en algunas localidades santafesinas no es muy diferente que hace 14 días. Con 114.359 contagios hasta ayer, el 78% de las camas de terapia están ocupadas y si bien los contagios diarios bajaron de 2.800 casos a 1.500 en los últimos 10 días hay localidades donde siguen en riesgo sanitario.
Sin embargo, atento al inminente período estival Perotti también plantea la idea de planificar un esquema de aperturas controladas para empezar a establecer actividades turísticas en aquellos lugares donde se pueda. De hecho, el mandatario de Santa Fe se reunió ayer con el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, quien le adelantó que en el verano habrá una ayuda de la Nación para fomentar el turismo, obras de infraestructura y la posibilidad de impulsar un turismo alternativo a la Costa Atlántica.
“Tenemos que dotar de infraestructura a los destinos turísticos y Santa Fe tiene mucho que ofrecer con una gran oportunidad”, dijo Lammens tras la reunión con Perotti.
En Neuquén el gobernador Omar Gutiérrez ayer se reunió con los intendentes de las seis localidades más complicadas porque el COVID-19 no da tregua. Estas son: Neuquén capital, Plottier, Centenario, Senillosa, Cutral Co, Plaza Huincul y Rincón delos Sauces. En esas zonas se llegó a niveles de contagio de hasta 24.500 casos pero en el resto de la provincia el tema está controlado con lo que se espera armar un operativo para que haya actividades turísticas en el verano.
En Córdoba hay una importante cantidad de localidades en que hubo apertura de actividades, el nivel de ocupación de camas descendió y el gobernador Juan Schiaretti pidió a la Casa Rosada avanzar hacia un esquema de flexibilización de cuarentena para empezar a preparar el período estival del turismo.
En este sentido, los voceros de Schiaretti explicaron a Infobae que se están trabajando los protocolos y ya hubo reunión con intendentes de 150 ciudades turísticas y con las cámaras de entidades turísticas para establecer un esquema inicial con quienes tienen propiedades en las zonas turísticas para que puedan acondicionar sus propiedades para la temporada.
En Mendoza, el gobernador, Rodolfo Suarez, solicitó formalmente a la Nación recategorizar nuevamente a los departamentos del Gran Mendoza, Tupungato y Tunuyán e incluirlos en la fase de Distanciamiento Social Preventivo y Obligatorio (DISPO). El pedido fue enviado al jefe de Gabinete con el detalle de la situación sanitaria y epidemiológica de la provincia.
En este sentido, Suárez dijo que “la curva de contagio se encuentra amesetada y en franco retroceso en cuanto a los porcentajes de positividad, la baja tasa de letalidad (1,62%) y la tasa de duplicación que a la fecha se encuentra en más de 60 (sesenta) días”. Con más de 49.000 contagios, la tasa de ocupación de camas UTI es de aproximadamente 80% y la de camas de sala, inferior al 65% (sesenta y cinco por ciento).
No obstante, Suárez pidió a la Casa Rosada que se contemple la autorización para reanudar las reuniones familiares, turf, centros culturales y salas, jardines maternales, salas de juego y casinos, Fútbol 5, escuelas de verano y natatorios en clubes.