El IPC de los productos comestibles pasó de ser 3% mensual en promedio en 2020 a 4,4% este año. En la región, solo Colombia tuvo una aceleración en la canasta básica atribuible a los precios internacionales.
Argentina forma parte de un grupo selecto de países que vieron sus índices de precios acelerar por la suba de los valores internacionales de los alimentos. La inflación de la canasta básica pasó de ser de 3% mensual en promedio en 2020 a ser de 4,4% en los primeros meses del año, mientras que en la mayoría de las economías de la región los índices desaceleraron o se mantuvieron estables, el Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea, es el que midió cuál fue el impacto del alza de los commodities en los precios de los alimentos
Ieral reflejó que el valor internacional de una canasta de alimentos (que contiene un mix de productos que incluyen los principales bienes alimenticios entre carnes, lácteos, aceites, granos y azúcar se viene incrementando al 3,2% mensual en los cinco primeros meses del 2021, lo que implica una aceleración considerable en relación con el 0,6% del 2020, “la inflación minorista en alimentos y bebidas no alcohólicas pasó del 3,0% mensual en el 2020 al 4,4% mensual en los primeros cuatro meses del 2021″, midió Ieral. “Es decir, la tasa que ya era elevada subió 1,4 puntos porcentuales”.
Garzón ( autor de la investigación ) consultó las cifras de inflación de los últimos meses en Brasil, Chile, Uruguay, Colombia, Perú, México, Costa Rica y Bolivia para poder compararlas con las de la Argentina. El sondeo arrojó como resultados que cuatro países muestran desaceleración de precios en los alimentos (Chile, Uruguay, Costa Rica y Brasil), tres de ellos aceleración (Perú, Bolivia y Colombia) y uno (México) no presenta cambios, La tasa de inflación mensual más alta se observa en Colombia (+1,3% mensual, lo que contrasta con el 0,4% del 2020) y la más baja en Costa Rica, en que los precios cayeron 1 por ciento. “Brasil y Uruguay, dos países limítrofes y quizás más comparables por canastas de consumo con Argentina muestran tasas del 0,4% y 0,5% mensual en el 2021″, precisa el trabajo publicado por el Ieral.
El informe de Ieral concluye que “lo logrado en estos países revela que la elevada inflación de Argentina particularmente en estos productos (una inflación que es 11 veces la tasa media de la región) no puede estar anclada en el contexto externo y debe encontrarse una mejor explicación del fenómeno, seguramente más asociada a la política monetaria (emisión pasada, actual o esperada en exceso a la que el mercado requiere) y la organización económica del país (economía cada vez más cerrada, dependiente del sector público y con bajos incentivos a la inversión privada)”.