La Argentina como es de costumbre tiene efectos múltiples respecto al los aumentos de precios. Ahora Rusia es influyente en el asunto
Aumentos sin control por alza de commodities
lgunos comerciantes comparan los aumentos de precios de los últimos días con lo sucedido tras las sucesivas devaluaciones de 2018-2019. Otros, más experimentados, directamente dan cuenta de momentos inolvidables de la década del ‘80, cuando la alta inflación se hizo incontenible. Como sea, la memoria emotiva no hace más que recrear tiempos de hipersensibilidad y miedo.
En las últimas jornadas, las subas de precios de productos de la canasta básica son imparables. A la alta inflación que atraviesa la Argentina, en especial en los alimentos, con subas bien arriba del 50% interanual, ahora se le suma el shock internacional por el impacto de la invasión rusa a Ucrania, que impulsa al alza a los commodities.
De hecho, algunas empresas líderes enviaron a sus clientes, en las últimas horas, listas de precios con aumentos, por segunda vez en una semana.
Los productos que más aumentan
Los aceites y los farináceos aparecen como los rubros más complicados por el shock de aumentos. Después aparecen los lácteos. En el último lugar de este ranking está la yerba, aunque en este caso nada tiene que ver el triste escenario internacional sino las derivaciones de la sequía y los incendios en la provincia de Corrientes.
En el caso de los aceites, las subas anunciadas por los fabricantes acumulan hasta 23% en una semana. Sobre todo en el caso de la variedad girasol, con un aumento del 9% la semana pasada y otro del 13% en las últimas horas.
El impacto de Rusia
El aceite de girasol se encuentra impactado por la guerra en Europa: Ucrania es el primer exportador de girasol y aceite de girasol del mundo. También es el tercer mayor productor y cuarto mayor exportador de maíz del mundo, el quinto de centeno y el octavo en exportaciones de trigo.
Desde España, la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac), ya avisó que la Argentina podría convertirse en el mercado alternativo donde conseguir el aceite que deja de proveer Ucrania.
Precio de la harina
En los farináceos también hay problemas. En este caso por la explosión en el precio del trigo, que ya se encareció 62% en dólares (en los mercados internacionales) desde que empezó la invasión, hace menos de dos semanas.
Ese salto podrá ser contenido en algunos productos, sobre todo en los que figuran incluidos en el programa Precios Cuidados, por el acuerdo entre el Gobierno y los productores para armar un fideicomiso, con subsidios cruzados.
Pero esa contención no alcanzará al resto, la gran mayoría de los productos. Ya hubo una primera tanda de aumentos, del 9% promedio.
Entre comerciantes medianos y grandes existe la previsión de que las remarcaciones podrían alcanzar al 25% en las próximas semanas, según pudo recabar iProfesional entre distintas fuentes.
En las empresas fabricantes, en tanto, no mencionan porcentajes, pero sí dan por hecho nuevos aumentos de precios si se confirma la actual vigencia de los valores en los mercados globales de las materias primas.
Más alzas por el efecto Rusia
Los primeros apuntados fueron las harinas y los fideos de calidad media a premium. Pero habrá más en las próximas horas: desde las tapas de tartas a empanadas y también las galletitas. De hecho, los aumentos más fuertes serían en estos segmentos, que no son los productos de primera necesidad.
«Un proveedor ya me avisó que aumentaban un 15% adicional en las próximas horas, y que habría que esperar nuevas alzas para antes de fin de mes», cuenta un mayorista, con un par de sucursales en la zona sur, que abastece a comercios de todo el conurbano.
Las principales empresas alimenticias ya enviaron los avisos a sus clientes en las últimas horas. Subas de hasta 13% en lácteos, una consecuencia directa de la escalada del precio internacional de la leche en polvo, el commodity que se comercializa en los distintos mercados de afuera.
El desabastecimiento como fondo de los aumentos
La cuestión tendrá también un condimento más «político». Desde las cámaras que agrupan a los supermercados chicos y medianos elevarán una queja a Roberto Feletti ya que entienden que son tratados injustamente por los fabricantes.
La cuestión ya no obedece a la suba de precios sino también a los faltantes. Sobre todo en productos del sector aceitero y lácteo. Los comerciantes afirman que son discriminados por la industria, que aparentemente prefiere abastecer a los grandes supermercados antes que a ellos. Es un verdadero todos contra todos.
La decisión de Vladimir Putin de invadir Ucrania provocó un shock de precios en los mercados globales. Lo mencionado más arriba: alzas del 62% en el trigo; del 18,5% en el maíz y también del 37% en el barril de petróleo tipo Brent, que es de referencia para la Argentina.
La soja otra vez arriba de los u$s600 la tonelada es parte del mismo efecto. Lo mismo que la leche en polvo, que vale u$s4.700 la tonelada, un valor récord.
Estos bruscos movimientos, a los que se les podría añadir lo que sucede con el precio del arroz o del café, siempre en los mercados internacionales, y por lo tanto en dólares, tendrán un impacto directo en las góndolas de los supermercados argentinos en los próximos días. El escenario de aceleración inflacionaria y faltantes en aceites y lácteos es un escenario cada vez más factible, en medio de la guerra en Ucrania.
Medidas que por el acuerdo, no serían de intromisión para controlar aumentos
Recién cerrado el acuerdo con el FMI y el debate recién iniciado en el Congreso, cualquier cambio podría complicar el escenario político.
De hecho, la posibilidad de un aumento en el nivel de las retenciones al trigo y al maíz se coló en el debate en el Parlamento.
En medio de las tensiones internacionales, el escenario inflacionario está cada vez más caliente. Se vienen semanas clave.
Iprofesional