Massa se reunió con el FMI, y se encamina a aprobar una nueva revisión del acuerdo. Podría aprobar el giro de u$s5.300 millones
Reunión de Massa con la directora del FMI
El ministro de Economía, Sergio Massa, mantuvo este mediodía en Washington una reunión con la primera subdirectora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, con quien evaluó la última revisión del acuerdo que aprobó hace dos semanas el staff técnico del organismo y que ahora deberá ser tratado por el Directorio para que se pueda concretar el desembolso de alrededor de u$s5.300 millones (unos 4.000 millones de DEG, la moneda del FMI).
«En el contexto de la cuarta revisión del programa del FMI, mantuvimos una buena reunión con la subdirectora gerente del organismo Gita Gopinath y su equipo, con quienes analizamos el impacto de la sequía en el país y se valoró el despeje de vencimientos de la curva en pesos», sostuvo el titular del Palacio de Hacienda tras el encuentro.
En esta línea, Massa señaló que junto a los representantes del Fondo se coincidió en la importancia de «la decisión del Gobierno de continuar avanzando con medidas que fomenten el incremento de exportaciones con el objetivo de fortalecer las reservas».
Junto a Massa estuvieron el jefe de Asesores del Palacio de Hacienda, Leonardo Madcur; el titular de la Dirección General de Aduana, Guillermo Michel; y Santiago García Vázquez, responsable de comunicación de la cartera.
La semana pasada, la nueva vocera del FMI y exjefa de misión del Fondo en el caso argentino, Julie Kozack, aseguró que el directorio del organismo tratará «muy pronto» el caso argentino para aprobar los u$s5.300 millones pautados, tras el visto bueno de la revisión técnica del staff.
Al respecto, señaló que «típicamente hay un período de tiempo» que se toma el directorio de no menos de dos semanas desde la aprobación de la revisión técnica, que en el caso argentino fue el último 13 de marzo, en la que se acordó también la revisión de metas de las reservas para el período 2023.
Kozack ponderó el manejo prudente de las políticas macroeconómicas verificadas en la segunda parte de 2022, en pos de «la estabilidad», y destacó «el cumplimiento del programa con cierto margen» sobre las metas previstas para el cierre del cuarto trimestre.
Nuevo crédito del BID
Massa comenzó ayer su gira en la capital norteamericana para acompañar al presidente Alberto Fernández, quien esta tarde se reunirá con el jefe de Estado Joe Biden en la Casa Blanca. Además, el ministro ya se encontró ayer con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, para acelerar los desembolsos de esa entidad a la Argentina durante el primer semestre del año. De hecho, el banco aprobó hoy un nuevo crédito para el país por USD 150 millones para el “Programa de Integración Socio Urbana y Mejoramiento de Vivienda”.
“Los beneficiarios serán 8350 Hogares Vulnerables registrados en el RENABAP residentes en Barrios Poulares y en sus Areas degradas Aledañas con déficit habitacional. A su vez, se priorizarán los hogares localizados en zonas con vulnerabilidad climática mitigable y liderados por mujeres, personas LGBTQ+, adultos mayores, migrantes y/o a cargo de personas con diversidad funcional”, se precisó.
Para este año, el BID tiene previstas operaciones por US$1.850 millones, focalizadas en programas de discapacidad e inclusión, sistemas de cuidados de salud, ciberseguridad, corredores viales para conectividad, líneas de transmisión eléctrica, servicios agrícolas provinciales, e integración socio urbana, entre otras.
El Gobierno espera que este viernes el Fondo Monetario Internacional otorgue su visto bueno a la cuarta revisión trimestral del programa, que incluye un cambio en las metas de acumulación de reservas y un diagnóstico con alertas por parte del staff del organismo sobre los próximos meses de la economía.
Las chances del «salvataje» del FMI
El Gobierno quiere que el Fondo Monetario juegue a full su rol de prestamista de última instancia. Que abra las puertas a un refuerzo de liquidez. Massa en persona planteó la gravedad del escenario ante Kristalina Georgieva, hace pocas semanas en la India.
Primero, le presentó todos los números del costo que a la Argentina le significó la guerra Rusia-Ucrania. Pero, sobre todo, el devastador efecto de la sequía histórica que sufre la Argentina y que impacta en la economía. Los últimos reportes de la Bolsa de Cereales y de la Bolsa de Rosario ya hablan de una falta de u$s20.000 millones.
Equivalen a una merma de hasta 35% en la cosecha gruesa de este año.
Héctor Torres, ex director del Fondo Monetario por la Argentina durante la época de Roberto Lavagna como ministro de Economía, le da alguna esperanza a la gestión de Massa. Torres, un conocedor de los detalles del Fondo, dice que el organismo posee líneas de emergencia para casos de catástrofes, como una sequía tan notable.
Esos préstamos especiales, en el caso argentino, podrían alcanzar a u$s5.000 o u$s6.000 millones, a un plazo de 20 años de plazo y 10 años de gracia.
Según Torres, es difícil que la Argentina pueda acceder a una línea de ese tipo, pero que -más allá de las opiniones-, lo cierto es que esos créditos están ahí y podrían usarse.
Falta de divisas
Por una parte, la sequía generó ya un fuerte impacto en el horizonte de acopio de divisas en el Banco Central por una menor producción agropecuaria y un menor nivel de exportaciones. Junto con eso, una recaudación tributaria recortada por ingresos más bajos de retenciones a las exportaciones. En el medio, una aceleración de la inflación que llevó al IPC de los dos primeros meses del año por encima del 6 por ciento; los expertos privados prevén que la suba de precios supere el 100%, frente al 60% estimado por el Gobierno.
Mientras tanto, el Palacio de Hacienda desarrolló una serie de medidas para buscar estabilidad en el frente financiero y que la sangría de reservas no derive en volatilidad en los precios de los dólares financieros, que se acercan a los $400, aunque subieron menos que la inflación.
INFOBAE/Iprofesional