El gobierno de Javier Milei continúa su ofensiva contra los organismos públicos. Ahora, el ministerio de Desregulación a cargo de Federico Sturzenegger anunció el despido de más de 100 trabajadores de la Defensoría del Público, un organismo creado para garantizar el derecho a la comunicación democrática.
Sturzenegger justificó la medida acusando a la Defensoría de dar «cobijo a una nutrida concurrencia de militancia rentada» y de haber sido utilizada para «perseguir» a periodistas afines al gobierno anterior. Además, comparó el estilo confrontativo del presidente Milei con el de Domingo Faustino Sarmiento, intentando naturalizar los insultos y descalificativos del mandatario hacia la prensa crítica.
Los gremios denunciaron que estos despidos forman parte de una avanzada más amplia contra los empleados estatales. Según estimaciones, para fin de año podrían llegar a los 76 mil los trabajadores que pierdan sus puestos en el marco del «achicamiento del Estado» impulsado por Milei.
Más allá de los argumentos esgrimidos, la decisión de eliminar la Defensoría del Público representa un claro ataque a la libertad de expresión y el derecho a la comunicación democrática. Un retroceso inaceptable en un contexto de creciente polarización y demonización de la prensa independiente por parte del gobierno.