Anteriormente las bolsas europeas se hundían al persistir los temores sobre la capacidad de los países de la Eurozona para lidiar con sus problemas de deuda y frenar la escalada en sus costos de financiación. En tanto, Wall Street había comenzado la jornada con leves bajas.
«Son los rendimientos de los bonos los que están moviendo al mercado», repetían los analistas del Viejo Continente.
A la colocación a interés récord de ayer en Italia, hoy se sumó con la misma suerte España y Grecia. El Tesoro español colocó 3.200 millones de euros (4.400 millones de dólares) en letras a 12 y 18 meses y pagó la mayor rentabilidad desde 1997, en una subasta marcada por la fuerte volatilidad del mercado. El diferencial de rendimiento de la deuda española alcanzó un nuevo máximo a solo cinco días de las elecciones generales.
Analistas dijeron que el Tesoro se ha limitado a colocar las letras a los niveles del mercado secundario, en un clima de tensión que en los últimos días también se ha trasladado a los plazos cortos del mercado. Ha recobrado fuerza la percepción de riesgo para España ante la inminencia de las elecciones y los persistentes problemas en Grecia e Italia.
«Puede que los inversores se mantengan un poco al margen de España hasta constatar el resultado electoral y conocer el programa económico del nuevo Gobierno», dijo Nicolás López, director de análisis y mercados de M&G Valores.
En tanto, Grecia recaudó hoy 1.300 millones de euros (1.758 millones de dólares) en bonos con un vencimiento a 13 semanas, según informó hoy el Ministerio de Finanzas.
El interés a pagar por la deuda griega fue hoy del 4,63 por ciento, por encima del 4,61 por ciento de octubre. Grecia, cuyo gobierno cambió a finales de esta semana, se encuentra sometido a una gran presión por parte de las instituciones económicas internacionales y de los mercados financieros.
Las primas de riesgo de España, Bélgica, Francia, Austria e incluso Holanda y Finlandia registraron hoy nuevos máximos desde la implantación del euro, por la disposición de los inversores a comprar deuda alemana.
Grecia tampoco se salvaba del descalabro, por lo que prácticamente sólo Portugal e Italia se escapaban de los máximos, aunque en el caso del país transalpino posiblemente por la compra de deuda por parte del Banco Central Europeo.
Otra vez el rendimiento del bono referencial italiano a 10 años volvió a subir hasta el 7 por ciento, un nivel considerado como altamente riesgoso para los costos de financiamiento del país, tras un cambio de Gobierno que no logró despejar las preocupaciones del mercado.
El nivel del 7 por ciento es visto como particularmente sensible debido a que Irlanda y Portugal tuvieron que pedir rescates internacionales cuando sus rendimientos superaron este umbral.