La FUBA y el Centro de Estudiantes de Ingeniería convocaron a una conferencia de prensa hoy, a las 11, en el Bauen, para dar a conocer detalles; «La investigación de inteligencia ilegal contiene información personal»
La Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) y el Centro de Estudiantes de Ingeniería (CEI) de la Universidad de Buenos Aires (UBA) denunciaron espionaje a estudiantes de esa casa de estudios.
Según publicaron en la página web de la FUBA, las autoridades del CEI durante 2006 y 2007, Leonardo Perna y Josefina -no se consigna su apellido- fueron investigados, «espiados ilegalmente».
«Esta investigación de inteligencia ilegal (como consigna el propio expediente en su tapa) contiene información personal de su domicilio, familia, vecinos, propiedades, etc. Los datos son del año 2007», explicaron.
«Ese año funcionaba en Ingeniería una agencia de seguridad privada contratada por el decano Carlos Rosito, con la potestad de portar armas de fuego adentro de la institución», agregaron.
Según denunciaron, el decano Rosito «continuó con sumarios y la reciente instalación de cámaras de seguridad en pasillos, aulas y laboratorios». Consideraron «un hecho de enorme gravedad» la existencia de «documentos confidenciales» con datos de estudiantes.
«Se persigue a los estudiantes de Ingeniería y al CEI por su lucha en defensa de la educación pública y por más presupuesto, con la que vienen frenando la acreditación de carreras a la Coneau», ahondaron.
CONVOCATORIA
En la FUBA y el CEI juzgaron que «no se puede dejar de vincular esta situación en la Facultad de Ingeniería con los avances de la represión y la criminalización de la protesta social en el último tiempo».
Exigieron que este «hecho de espionaje» no quede impune y que el decano Rosito, el Consejo Directivo de la Facultad de Ingeniería y el Consejo Superior de la UBA esclarezcan el hecho.
Además, convocaron a organizaciones gremiales, sociales y políticas a solidarizarse y a participar de una conferencia de prensa hoy, a las 11, en el Hotel Bauen.
PROYECTO X
Según organizaciones sociales y gremiales que fueron «espiadas», según denunciaron a la Justicia, Proyecto X es «una modalidad de espionaje ilegal [de Gendarmería Nacional] que criminaliza la protesta social».
Según la ministra de Seguridad , Nilda Garré, Proyecto X es «un sistema informático, un software, que permite cruzar información y acelerar análisis en situaciones de inteligencia e investigación».
Muy disconformes con las explicaciones oficiales, dirigentes opositores reclamaron que la ministra de Seguridad asista al Congreso para aclarar dudas respecto de Proyecto X.