Hoy se vuelve a renovar la lucha y la vamos a llevar hasta las últimas consecuencias, anunció ayer don Mario Escudero, en un encuentro con la prensa local. Por su parte, el abogado de la familia, Guillermo Domeniconi, anunció que la Justicia corrió traslado al planteo de nulidad de la expropiación.
Cabe recordar que la familia Escudero fue el bastión de la resistencia a las expropiaciones en Estancia Grande, una movida que comenzó en 2009 bajo el título de “utilidad pública”. En las tierras de los Escudero, y en las de 5 familias más, el Gobierno supuestamente iba a construir un centro de salud, una escuela, un centro cívico “y demás estamentos que resultan necesarios para el funcionamiento del Municipio de Estancia Grande”.
El centro cívico se hizo, pero en los demás terrenos expropiados solo se encuentran carteles que anuncian la construcción de emprendimientos privados como un hotel y un centro comercial. Estos carteles de emprendimientos privados se encuentran a la vista de todo el mundo, dando un claro ejemplo de la impunidad con la cual el Gobierno de Alberto Rodríguez Saá manejó este tema y de la total complicidad de la Justicia, la cual no solo ordenó el desalojo de las familias, sino que nunca investigó el destino de estas tierras que iban a ser de “utilidad pública”.
“En rigor no hubo expropiaciones porque para que existan necesitan, además del decreto del Poder Ejecutivo que determina la necesidad de contar con cierta extensión de tierra para realizar una obra pública, ese decreto debe ir a la Legislatura para que, con una mayoría especial, declare la utilidad pública. A partir de allí, recién se inicia el juicio de expropiación. Acá han expropiado por decreto”, explicó Domeniconi, quien además precisó que ayer se dio traslado al planteo de nulidad, para que el Gobierno se haga parte y ejerza su derecho a defensa dentro de un plazo de 30 días..
“De allí surge a sanción que me aplica el Colegio de Abogados, en el marco de la denuncia planteada por el juez Ruta en mi contra, alegando delitos de calumnias e injurias. Tratándose de delitos penales, ¿por qué Ruta, teniendo facultados sancionatorias, no me denuncia ante la Justicia penal? Es porque no existió tal delito”, agregó el letrado, refiriéndose al juez Agustín Ruta, quien, en 2011, ordenó el desalojo del campo de los Escudero, recordándole a todo el mundo porqué siempre fue conocido como el “mercenario de los Rodríguez Saá”.
Esta es una sanción que se aplica al pueblo entero porque bajan un mensaje: aquel que se atreva a hablar contra el Gobierno, debe ser sancionado, debe ser sancionado. “Me quieren amordazar, pero vamos a seguir defendiendo a Don Mario porque creemos que es lo correcto. Han desterrado a seis familias de Estancia Grande para realizar un mega proyecto privado”.
“Están expropiando muchísimas más tierra de la que corresponde para lo que pretenden hacer. 222 hectáreas es una locura, imaginate que el casco céntrico de San Luis tiene 170 hectáreas. Nosotros vamos a seguir adelante con este juicio, vamos a llegar a sentencia, ya sea en la provincia o en la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, concluyó Domeniconi.
Las palabras de Don Mario
“Tuve un cambio de vida de 180 grados, de ser un hombre independiente, acostumbrado a tener una pequeña explotación que me permitía, junto con un poquito de mi jubilación, vivir en libertad, ahora tengo prisión domiciliaria en un departamentito de 3,50 por 4”, fue lo primero que nos dijo Don Mario, un hombre sencillo, humilde y educado como pocos, infinitamente agradecido por cada nota que le hemos hecho y que siempre nos recibe o despide poniéndose de pié y dándonos un fuerte apretón de manos.
Don Mario vive ahora en un austero departamento en El Volcán, amoblado con lo poco que pudo rescatar o comprar luego del violento desalojo de julio de 2011, cuando su anterior vivienda fue tirada abajo. “En el asalto que me hizo esta gente se llevaron totalmente todo, hasta el auto me robaron. Yo tenía fiambres, jamones, bondiolas, se llevaron todo, me dejaron absolutamente sin nada. Imagínese lo que me ha producido eso, he estado bajo vigilancia médica”, contó Escudero, con su voz quebrada por la bronca que le produce recordar como el Gobierno arrasó con su propiedad.
“Ellos no han hecho nada en el campo. Hicieron destrozos, como la vivienda que me voltearon. Es tremendo el daño que han hecho para no hacer absolutamente nada. Lo de las expropiaciones invocando la utilidad pública son argumentos falsos. Los campos que han expropiado ahí después aparecieron sembrados con soja, verdeo. Es evidente que eso no es un emprendimiento público. Hoy se vuelve a renovar la lucha y la vamos a llevar hasta las últimas consecuencias. Exigimos justicia”, concluyó Don Mario.
* Fotos de los emprendimientos privados cortesía de Periodistas en la Red.
LA GACETA DE SAN LUIS