The Guardian, en su portal de internet, asegura que tiene datos confirmados por «fuentes directas». Según un testigo «que alguna vez fue rehén de ese grupo en Siria«, el extremista se hace llamar John y se sospecha que ha llegado a combatir contra el régimen de Bashar Al Assad desde Londres.
Sería el líder de un grupo de tres yihadistas británicos que tiene como misión secuestrar y mantener en cautiverio a extranjeros en Raqqa, territorio sirio.
El periódico afirma que fuentes en Siria reconocen al hombre como una pieza clave para las negociaciones de rehenes. De hecho, habría mantenido conversaciones con varias familias de los extranjeros secuestrados.
EL VERDUGO BRITÁNICO ES INTELIGENTE, EDUCADO Y UN DEVOTO CREYENTE DE LAS ENSEÑANZAS ISLÁMICAS RADICALES
Testigos confiaron al medio inglés que el verdugo británico «es inteligente, educado y un devoto creyente de las enseñanzas islámicas radicales». El diario afirma, además, que estos ex rehenes los bautizaron como «The Beatles» por su nacionalidad.
El ministro de Relaciones Exteriores británico, Philip Hammond, en una entrevista concedida al programa radiofónico Today de BBC 4, dijo que el hombre que comete el supuesto asesinato del reportero estadounidense podría ser un ejemplo más del «significativo número de británicos que luchan con Estado Islámico en Siria e Irak».
«Lo que está ocurriendo en Irak y Siria es un veneno, un cáncer y podría extenderse a otras partes de la comunidad internacional y afectarnos directamente», puntualizó el jefe del Foreign Office.
Foley, de 40 años, fue secuestrado en el norte de Siria en noviembre de 2012 mientras se encontraba cubriendo como reportero el levantamiento contra el gobierno de Bashar Al Assad para varios medios extranjeros. En el video de unos cinco minutos de duración dado a conocer el martesy cuyo título es «Un mensaje para Estados Unidos», se puede ver a Foley con un traje naranja, arrodillado y con las manos en la espalda junto a un militante enmascarado vestido de negro. El Estado Islámico dijo que la decapitación era una represalia por los bombardeos estadounidenses a sus posiciones en Irak, pero estos continuaron.