El presidente de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti expresó ayer su “beneplácito” por la designación “en comisión” de Horacio Rosatti y Carlos Fernando Rosenkrantz como nuevos integrantes del Máximo Tribunal, aunque eludió opinar sobre la decisión del gobierno de Mauricio Macri de hacerlo a través de un decreto, lo que generó una catarata de críticas desde ámbitos judiciales y políticos. Sin embargo, Lorenzetti no les tomará juramento hoy a los dos nuevos jueces, tal como pretendía el Gobierno, que anoche seguía negociando.
En un acto donde se homenajeó al juez Carlos Fayt, que dejó la Corte la semana pasada, Lorenzetti elogió ayer al mediodía a los dos juristas designados por el Gobierno. Destacó su “prestigio” y remarcó que son “bienvenidos” a la Corte, aunque aclaró que los actuales jueces del Máximo Tribunal no fueron consultados sobre la metodología de designación por decreto. “Nosotros como Corte Suprema no fuimos consultados ni debemos ser consultados porque es una cuestión que corresponde al Presidente. Nosotros somos totalmente ajenos y no podemos opinar, es otro poder del Estado”, destacó luego del acto.
El Gobierno decidió poner en funciones “en comisión” a los dos nuevos jueces a través de un decreto. Lo hizo amparándose en el inciso 19 del artículo 99 de la Constitución, que establece que el Presidente “puede llenar las vacantes de los empleos que requieran el acuerdo del Senado y que ocurran durante su receso por medio de nombramientos en comisión que expirarán al fin de la próxima Legislatura”.
Entre los más críticos, argumentaron ayer que ese artículo no se aplica a los jueces de la Corte y que no tiene antecedentes históricos. En el Gobierno, sin embargo, aseguraron que los nombramientos son legales y que los pliegos serán debatidos en el Congreso a partir de marzo. “Todo esto entra en discusión cuando comience el trabajo de sesiones ordinarias en el Senado”, argumentó ayer la vicepresidenta Gabriela Michetti.
Entre los apoyos se destacó la palabra del radical Ernesto Sanz, quien defendió el mecanismo. “Macri tiene derecho a construir fortaleza. Siempre se dijo que solo el peronismo podía gobernar”, opinó. Sin embargo, desde el mismo frente Cambiemos, Ricardo Alfonsín y Ricardo Gil Lavedra, entre otros, cuestionaron el decreto. También se expresaron en contra ex candidatos presidenciales como Sergio Massa (UNA) y Margarita Stolbizer (Progresistas).
El kirchnerismo se sumó a las críticas. El jefe del bloque del FPV en Diputados, Héctor Recalde, evaluó que Macri cayó en un “abuso de derecho”, mientras que su antecesora Juliana Di Tullio dijo que la decisión del Presidente es “propia de un dictador” y habló de una vuelta “a la Corte adicta de (Carlos) Menem”.
Lorenzetti y el resto de los jueces de la Corte no quisieron opinar ayer sobre el mecanismo porque podrían tener que fallar sobre la constitucionalidad en un corto plazo. “Con referencia al procedimiento quiero decir muy claramente que nosotros como Corte no fuimos consultados ni debemos ser consultados porque es un procedimiento que define el Presidente, no la Corte. No tenemos ninguna opinión que dar al respecto”, expresó Lorenzetti.
Frente a los medios, el titular de la Corte dijo ayer al mediodía que no podría negarse a tomarles juramento. Sin embargo, anoche fuentes de la Corte dijeron a Clarín que no había un acuerdo para que la jura se produzca hoy. La decisión sería un intento de los jueces de la Corte para no verse involucrados en la polémica por la forma elegida para completar las vacantes.
La Corte tiene actualmente sólo tres de sus cinco miembros a raíz de las renuncias de Carlos Fayt y Raúl Zaffaroni durante este año, a lo que debe sumarse los fallecimientos de Carmen Argibay, el año pasado, y Enrique Petracchi, durante 2015. Con ese esquema, todos los fallos a partir de ahora deberían ser por unanimidad. Si aparece alguna disidencia, deberían actuar los conjueces elegidos por el gobierno de Cristina Kirchner.
En las últimas semanas, Lorenzetti había reclamado públicamente la pronta ocupación de las vacantes aunque había dicho que el Máximo Tribunal podía funcionar con tres jueces.
fuente CLARÍN