Dinero escondido en el entretecho de su casa, compras millonarias de hoteles, declaraciones de inmuebles a menor costo del real, adquisición de bienes para lavar dinero, el rol de Cristina Kirchner en todas las operaciones, las reuniones en la Quinta de Olivos, los problemas en las declaraciones juradas de los Kirchner, son sólo algunas de las principales confesiones de Víctor Manzanares, ex contador de la Senadora y recientemente aceptado como imputado colaborador. Clarín accedió en fuentes judiciales a sus tres declaraciones indagatorias que lo convirtieron en “arrepentido” en la causa de los cuadernos de las coimas.
En su última confesión del 17 de febrero, el ex contador hizo puntual referencia a Cristina Kirchner. Para él, la Senadora tenía conocimiento del dinero que manejaba Daniel Muñoz y preguntó sobre las operaciones realizadas en el exterior. Además, habló de cómo creció el patrimonio de los Kirchner.
«Los principales factores de apalancamiento financiero en el incremento patrimonial de la familia Kirchner durante la década en la que desarrollaron su actividad económica”, Entonces, dijo que fueron dos factores. El primero por su magnitud y duración “durante el tiempo, 11 años, fue el Complejo Hotelero Los Sauces con las empresas del Ingeniero Juan Carlos Relats. Me refiero a las sociedades Rutas del Litoral SA, JCR SA, y Panatel SA”.
Siendo el segundo factor “de apalancamiento financierolas ventas de inmuebles en Rio Gallegosrealizadas durante el año 2008”. Allí, Manzanares explicó que el inicio de la familia Kirchner en la actividad hotelera “no es a partir de febrero de 2008, sino dos años antes, en el año 2006. Por lo que no son tres los hoteles de la familia Kirchner si no cuatro. El complejo hotelero los Sauces es la gema de esta colección, que tuvo los mayores niveles de valores de locación, pero menos ocupación y menos cantidad de habitaciones”.
En este sentido el contador dijo que “Néstor Kirchner demostraba orgullo con ese Complejo y me decía que el día que dejara la presidencia se iba a dedicar a dar conferencias por el mundo y que allí iba a recibir a dignatarios extranjeros”. Dijo que el contacto profesional con este Complejo se dio a partir de un llamado del Señor Osvaldo Sanfelice para que vaya a su inmobiliaria a fin de recibir instrucciones sobre la forma en que debía facturar a Rutas del Litoral SA, sociedad propiedad de Juan Carlos Relats”.
En ese marco, inició la facturación y pidió el contrato de locación “en el principio, se alquiló todo el complejo, es decir dos hoteles, por la suma 120.000 dólares en total, mensuales. Eran dos complejos, Sauces I y II, que fueron locados, a 60.000 dólares cada uno. Ese contrato duró aproximadamente dos años y cuando se renovó, se unificó en valor. Se hizo un solo contrato y se estipuló un valor locativo en la suma de 90.000 dólares, con más una clausula mediante la cual se aumentaba el valor locativo, un plus, siempre que la ocupación hotelera superase el 50 por ciento del nivel de ocupación”.
Al referirse a los hoteles de los Kirchner, el contador dijo “si hiciéramos una comparación entre Alto Calafate y El Complejo Los Sauces, sobre el impacto en la economía de la familia Kirchner, el segundo resultó más significativo que el primero. Alto Calafate estuvo alquilado desde 2009 hasta 2011 por 80 mil dólares mensuales bajando a 469 mil pesos en el año 2011; mientras que Los Sauce estuvo alquilado a Relats durante 11 años a 90 mil dólares mensuales y no fue problema el cepo cambiario porque los pagos era en pesos aunque las facturas fueron en dólares. Estamos hablando que este contrato significó una suma de entre 10 y 11 millones de dólares de ingreso en blanco a la economía de los Kirchner”.
Reforzó el concepto: “No se puede hablar de otro factor de apalancamiento financiero más importante que este. No puede quedar ajeno a ninguna investigación judicial. Si no se contempla esta operación se estaría sesgando todo análisis sobre el crecimiento y la estructura patrimonial de la familia Kirchner”. La baja en el monto del contrato de Alto Calafate sucedió porque a Lázaro Baez “se le hacia insostenible un contrato en dólares con un tipo de cambio variable. A principio del año 2010, un sábado por la tarde, Lázaro Baez vino en mi casa para pedirme que intercediera con Néstor Kirchner y le manifestara sobre la peligrosidad de mantener estos valores. Su intención era pesificar los contratos de locación que mantenía en dólares con la familia Kirchner. Le trasladé esa inquietud al Doctor Kirchner, sintiendo yo incluso algún tipo de temor ya que yo nunca había tenido intervención en la negociación de valores locativos. Él me dijo que no, que esas eran ideas de Baez porque el hotel le dejaba buenas ganancias”.
Sanfelice el «López Rega»
Esto ocurrió en una visita que realizó a Buenos Aire, en esa reunión estuvo Sanfelice “que le decía a Kirchner que estaba todo bien, lo inflaba. Sanfelice era para Kirchner lo que Lopez Rega era para Isabelita”.
Una inconsistencia llamó la atención. Ricardo Barreiro -ex jardinero- “cumplía funciones de logística y gerenciales en este Complejo. Barreiro me explicó que el amueblamiento era de Kirchner, aunque yo como su contador no tenia constancias del ingreso en su patrimonio de esos bienes”, dijo.
En un siguiente viaje a Buenos Aires, le manifestó su preocupación sobre estas circunstancias, “me pido que lo vea a Benolol para ver si podría darnos una solución desde el lado del locatario. Benolol me dice que intentará disfrazarlos dentro del amueblamiento de bienes de uso de Panatel, para dificultar su detección ante una auditoria. Le comenté a Kirchner sobre el disfraz que se pretendía darle. Todo este amueblamiento fue fotografiado, relevado e incorporado en el acuerdo de recisión del contrato de agosto de 2016, por lo que es fácil identificar como está compuesto”.
Cuando se rescindió el contrato, afectado por el tipo de cambio actual, Manzanares se reunió con Cristina Kirchner, “viajé y mantuvimos una reunión en el departamento de calle Juncal. En esa reunión me pidió que me haga cargo, pero que bajo ningún concepto aceptara esa pesificación a un valor de 10 pesos. Me dio instrucciones para que reclame los valores de diferencia y que le llevara una respuesta en lo próximo”.
Los Relats “querían mantener los valores locativos del año 2015 en cuanto al valor de la divisa, esto es pagar unos 90 mil dólares mensuales a un valor de 10 pesos promedio por billete extranjero y además que se le otorguen las mismas condiciones que tenía Sanfelice para el Alto Calafate, es decir dos meses de temporada baja en los cuales no se paga alquiler”.
Manzanares trasladó la propuesta Cristina “que me contesta que no, que no quiere reunirse con ellos, que tampoco acepta los dos meses de baja y la fijación de un tipo de cambio. Cristina, un tiempo después, comprende que su inflexibilidad puede llevar a la pérdida de la locación y cede en los puntos de los valores locativos y los dos meses de temporada baja. Pero este cambio de posición ocurrió tarde, porque ya para entonces recibo en mi oficina anterior, la que estaba en calle Alcorta 56, una carta documento de Panatel SA manifestando la recisión del contrato”.
Hubo una indicación de Romina Mercado ya con el hotel fuera de funcionamiento, “por indicación de Mercado, comienzo a liquidar las diferencias no pagadas correspondientes a los meses de enero, febrero y marzo y facturo dos meses, abril y mayo, en los cuales no se había facturado el alquiler, esto a pedido de Benolol. Le envío las facturas a Benolol (contador de Panatel), con los detalles de los meses adeudados, intereses resarcitorios, multas, los meses de abril y mayo, con más las facturas en curso de junio y julio. Esa liquidación completa, era por una suma millonaria, aproximadamente por 12 millones de pesos (…) Efectuó una nueva liquidación, sin las multas pero con los intereses resarcitorios, un importe aproximado de 8.600.000 de pesos de importe neto, descontadas las retenciones”.
Comparación de los hoteles K
Hizo una vinculación en los planteos, y Manzanares habló de Austral Construcciones “cuando construye el Complejo Hotelero Los Sauces Plaza Patagonia Néstor Kirchner no pagó un solo centavo. De modo tal que cuando yo hacia las declaraciones juradas de Néstor Kirchner consignaba un pasivo a favor de Austral Construcciones cercano a los 8.329.000 de pesos que correspondía al saldo impago de las facturas emitidas por Austral Construcciones por la obra ejecutada. Contablemente toda sociedad anónima imputa en el rubro créditos este tipo de saldo, pero eso no significa que se trate de una operación de mutuo”.
Se mantuvo impago el pasivo, durante dos ejercicios consecutivos. “Yo aconsejé a Néstor Kirchner solucionar este tema porque sostenía que no era creíble, le insistía en que ese pasivo debía ser cancelado. No recuerdo cuanto tiempo pasó desde este consejo hasta que Néstor Kirchner toma la decisión para ultimar lo concerniente a la cancelación del pasivo y que debía hacer esto el 30 de diciembre de 2008, día que le vencía un plazo fijo por un monto significativo”.
Los plazos fijos de Néstor Kirchner
Entonces explicó que Néstor Kirchner constituía sus plazos fijos y los renovaba por un plazo de 180 días. “Las negociaciones de esos plazos fijos y de las tasas las manejaba siempre Raúl Copetti. Cuando el Banco Santa Cruz era estatal Copetti negociaba los plazos fijo con los directivos, podía ser con Lázaro Báez, Hugo Álvarez, o con Roberto López. En el año 1998, cuando se privatiza el Banco de Santa Cruz, continuó tratando la cuestión directamente con Sebastián Eskenazi o con Claudio Canepa”.
¿Cómo se hizo todo? El 30 de diciembre 2008, “concurrí junto con un enviado del Contador de Báez, Fernando Butti, al Banco de Santa Cruz (…) esperamos que se habilitara el sistema interno del banco para que se acreditara en la cuenta de Néstor Kirchner que antes referí, el importe del plazo fijo que se había liquidado”. Desde esa cuenta se transfirió luego, a la cuenta de Austral Construcciones, las sumas adeudadas, “es decir los aproximadamente 8 millones de dólares, más los intereses que representaban aproximadamente 1 millón más, menos la retención de impuesto a las ganancias. Con el dinero restante Néstor Kirchner constituyó un nuevo plazo fijo”.
Néstor Kirchner estaba junto a Lázaro Báez cuando todo esto ocurrió, “todo duró alrededor de dos horas, Néstor Kirchner con Lázaro Baez transitaban las calles de la ciudad en un auto conducido por Daniel Muñoz, ansiosos por recibir novedades y saber si el tema estaba o no concluido. Muñoz así me lo comentó, también me dijo que Néstor Kirchner le había dicho a Lazaro Baez ´Fijate a ver cómo me la devolvés´.
Reuniones con Cristina y las «llaves del tesoro»
Comenzó entonces a referirse a Cristina Kirchner. Dijo que en 2015 fue por la ex Presidenta “ a Olivos a la noche. Creo que fue entre los meses de mayo y julio aproximadamente. Tenía que traer la planilla de posición monetaria. Llego a Olivos temprano, me quedo sentado en unos sillones en una sala contigua. Van llegando personas de mi conocimiento, entre ellas Zanini, Romina Mercado y el arquitecto Pablo Grippo”. A eso de las 21.30 llegó Cristina Kirchner y mantuvieron “una reunión de escaso minutos donde le entregue la planilla de saldos monetarios. Como no tenía cómo volver al centro, me facilitó un auto de la custodia para que me lleve al centro. Al día siguiente me voy a ver a Daniel Muñoz y le cuento lo que había visto de Grippo y su emprendimiento. Daniel me mira y se sonríe. Me dice ´Alejandro, yo iba con la plata al astillero a pagar ese barco´. Ese barco actualmente a nombre de la empresa Mar Patag y hace excursiones en Lago Argentino”.
Avanzando con su relato, Manzanares dijo que cuando falleció Néstor, el último en llegar a El Calafate fue Daniel Muñoz. “Llevaba consigo las llaves de los tesoros, que eran los lugares donde se guardaba dinero. Daniel me dijo que sintió asco y repugnancia de la cara de la gente que fue a buscarlos al aeropuerto, especialmente la de Sanfelice, por la avidez que mostraban por la llaves”.
Reunión por los Panamá Papers
Hubo otra reunión con la ex Presidenta. Fue cuando salió el caso de los Panama Papers, “Cristina me interroga, sabiendo de mi relación cercana a Muñoz, sobre qué sabía yo al respecto. Le respondí que me había enterado por un mensaje de Muñoz un día antes que la noticia tomara estado público”. La respuesta de la Senadora fue: “Con razón tardó tanto tiempo en devolverme las llaves del departamento de la calle Uruguay” y el contador agregó, “desde mi punto de vista, entre la contradicción de Cristina sobre las llaves de los tesoros y lo que me dijo Muñoz de que entregó las llaves el día de la muerte de Néstor, infiero que alguien que haya recibido esas llaves de Muñoz no se las haya devuelto a Cristina de manera inmediata”.
En ese departamento Bonadio determinó que se hicieron más de 87 entregas de bolsos con con 70 millones de dólares. Manzanares fue al lugar una vez con Muñoz, “Muñoz me dijo que iba a dejar dinero”.
La «alegría» por la muerte de Muñoz
Cuando murió Daniel Muñoz, Cristina -según los dichos de Manzanares, dijo: “menos mal que se murió´, en un sentido de que parte de los secretos de Néstor y Muñoz están resguardados. Hoy, estoy poniéndole luz a esos recuerdos. Este comentario fue en la casa de calle Mascarello, en Río Gallegos” Preso en Marcos Paz inicia otra relación con la familia Kirchner. Contó Manzanares que antes de su detención, el abogado de Cristina, Carlos Berladi, se ofreció a “Defenderme de manera gratuita”, pero ya preso “Fabián De Sousa dijo que había pagado, como defensa para todos, unos 7 millones de dólares como defensa integral, lo que chocaba con mi concepto de que me estaba atendiendo gratis por mi asistencia personal”.
Contó cómo fue el quiebre de la relación con Cristina y sus hijos. “Cuando yo caigo detenido, yo no había confeccionado las DDJJ de impuesto a las ganancias de Cristina, Máximo y Florencia. Esa es una de las razones de abandono de Cristina y su familia hacia mí. El desastre de papeles y desorden me habría demandado varias semanas su confección. A ello se sumaba lo de Hotesur y el cambio de autoridades. Era mucha presión y demasiado riesgo, pues estaban por vencer las declaraciones ante la OA y ambos, Máximo y Cristina, pretendían ser candidatos”.
Finalmente habló de la relación de Muñoz con Kirchner. “A Dios ya se lo he pedido en muchas oportunidades en Marcos Paz y con él pude obtener una confesión, a través de un Sacerdote, como hacía mucho tiempo no lo había tenido. Hacerlo feliz a Daniel Muñoz era el sumun para mí, porque Kirchner lo maltrataba, le pegaba, entonces yo lo llamaba por teléfono desde Río Gallegos y le decía te fabriqué dos o tres millones de pesos de blanco y le pedía que vaya de Shopping, a gastárselo. Yo disfrutaba esa actividad por la satisfacción que le generaba a Daniel. No lo hacía solamente por avaricia. Con esto no pretendo mejorar mi situación, sino hacerme cargo de lo que hice”,
La primera confesión
de Víctor Manzanares como contador de la familia Kirchner fue el 5 de febrero, allí dio precisiones sobre un tema delicado para la ex Presidenta: la investigación que en cuatro meses se cerró y donde se la investigó junto a Néstor Kirchner, por enriquecimiento ilícito. Entonces el contador, dijo que el ex Presidente le ordenó ir a la SIDE donde Javier Fernández lo encontró y trasladó en un vehículo a la casa del ex juez Norberto Oyarbide, responsable del expediente. Además contó cómo Néstor Kirchner quiso comprar dos hoteles en Ushuaia, confesión que ya publicó Clarín.
La segunda confesión
Fue una vez más, ante los fiscal Carlos Stornelli y Carlos Rívolo fue el 7 de febrero. En más de 20 páginas, el ex contador de Cristina Kirchner dijo: “En el año 2009 tenía intenciones de desarrollar una usina para lavar dinero aprovechando la legislación de Tierra del Fuego (…) No recuerdo con precisión cuánto dinero se llegó a lavar, aproximadamente entre 5 y 7 millones de pesos durante el periodo en el que se desarrollaron estas operaciones”, contó. Se refirió a un restaurante y al rol de Cortéz con quien adquirió una cadena de Farmacias con el mismo fin: blanquear el dinero que Daniel Muñoz llevaba a Santa Cruz de las coimas recaudadas.
Operación para lavar dinero
“Daniel Muñoz abonaba los gastos de la sociedad”, sentenció y después reiteró la idea: “Todo este dinero era de Muñoz. La decisión de las compras las hacía, en este caso en particular conmigo, en todo lo referente a lo inmobiliario en Río Gallegos y en el Sur, hasta que le confió estas operaciones a Cortez”. Allí contó que entre 2009 y 2010, con intermediación de Cortez, “se compran la sociedad LLOMAR SRL, con tres farmacias adentro. (…) Esa operación, es decir la compra de las farmacias y los inmuebles, se acordó en € 3.700.000”, pero la operación terminó haciéndose en dólares, “lo que complicó las cosas porque el efectivo que teníamos era en Euros”. El cambio de dinero se hizo con la intermediación del financista Ernesto Clarens: “coincidimos en el Banco de Santa Cruz, en la zona de cajas de seguridad, donde hicimos el cambio de moneda. (…) Como era una cifra grande, recuerdo que usamos las máquinas de contar billetes del área de Tesorería”.
Posteriormente, contó Manzanares también empezaron a lavar dinero con la compra de terrenos en El Calafate, “hubo una compra de un terreno por USD 50.000, justo frente al Hospital nuevo, a nombre de MM SERVICIOS. Esta operación la efectuó Muñoz personalmente, usando un amigo en El Calafate. A mí se me informó que vaya a una Escribanía en Río Gallegos a firmar la escritura. No aboné, solo firme”. A posteriori, Gugino desarrolló el proyecto para hacer una farmacia, que nunca se construyó, en un lugar estratégico, puesto que se ubica frente al Hospital. En el momento de la compra del terreno, el Hospital no estaba inaugurado, pero era inminente su apertura”.
Después de estas operaciones, el ex contador de Cristina viajó a Miami “por invitación de Muñoz para la compra de tres departamentos, previamente seleccionados por Cortez por sus contactos inmobiliarios y con una sociedad creada por él, Cape Fairweather”, allí surgió “la idea de comprar un laboratorio. A ese viaje, fui como hombre de confianza de Muñoz y también para efectuar la transferencia de fondos pertenecientes a Muñoz, que estaban en una cuenta de mi titularidad, a una cuenta de Cortez para que sean aplicados a la compra de los inmuebles. Muñoz invertía en empresas y les daba mayor valor con nuevas incorporaciones monetarias”.
Comisión incumplida
Hubo una promesa fallida. Manzanares dijo que “el blanco ya se los había creado” con la estructura de adquisición de inmuebles y de las Farmacias, “teóricamente mi comisión iba a ser de 6 millones de dólares, el 15% que me habían prometido (…) Muñoz me dice que 6 millones de dólares es mucho y me sugiere reducirlo a 1,5 millones de dólares. Le dije que no tenía inconvenientes. Estando en tratativas esa negociación, Mariana Zuvic puso su ojo nuevamente en los negocios de Muñoz y éste decidió replegar la operación”.
Un ejemplo: Muñoz inició la compra de San Up S.A, que era de Jorge SHEMI. “Fue un negocio que trajo Cortez. La operación de compra fue por 34 millones de dólares, según me informó Muñoz, aunque en los papeles creo que se consignó 8 millones de pesos. Eso obra en las declaraciones juradas fiscales de Cortez y Llaneza. Esa compra se hizo en efectivo”.
Compra de una empresa minera
“Entre los años 2007 y 2008, Amilcar Acosta se acercó a mi estudio contable solicitando una entrevista para plantear si podía analizar su empresa dedicada al tratamiento de residuos de actividad minera. Le recomiendo incorporar un inversor. Me dice que estaba dispuesto a vender el 50% de la empresa por un millón de dólares. Le planteo el negocio a Muñoz”. Tiempo después, Manzanares le entregó “a Acosta personalmente los fondos de Muñoz que tenía en custodia en el Banco de Santa Cruz. Si bien pidió 1 millón de dólares, le entregue a Acosta la suma de 1 millón de Euros. El ingreso a la empresa se hizo a través de un acta de socios, incorporando a Carolina Pochetti como gerente de la empresa”.
Esta empresa tuvo una llamativa inyección de dinero que le había dado Muñoz, “aproximadamente unos 15 millones de dólares. Fue tanta la inversión de dinero que insertó Muñoz que en un momento no se pudo justificar una inyección de 2 millones de dólares. Se recurrió a una operación compleja a través de cooperativas”.
Con Muñoz, el contador tenía la empresa de colectivos RB Transportes y unos departamentos que habían construido en un terreno fiscal, “los que se conocen como de 7 pesos con cincuenta el metro cuadrado (…) Muñoz me pidió que ponga a la venta esos departamentos para evitar que la justicia encuentre una huella suya”, después de concretar la venta, “ese dinero vino a parar a mi oficina y lo conservé en las cajas fuertes que allí dispongo. No recuerdo el destino final que tuvo. Si recuerdo que cada departamento valía unos USD 70.000 aproximadamente.
El hotel favorito de Cristina
En esta segunda confesión, se refirió al hotel boutique de Cristina, Los Sauces Casa Patagónica. “Al momento de que el Dr. Kirchner alquilara el Complejo Hotelero Los Sauces al Grupo Relats, Muñoz logra un acuerdo, con una persona ya fallecida, de apellido Olivera, quien era el referente del Hotel Panamericano en Calafate. Así, Oliver alquila, a nombre propio, las seis cabañas para alojamiento del personal del Complejo Hotelero Los Sauces. En esa época era un alquiler caro, un muy buen alquiler, unos 60.000 pesos mensuales por las cabañas”. ¿Para qué sirvió esto? “Muñoz pudo capitalizarse y justificar ingreso en el juicio por enriquecimiento”.
Manzanares le compra de Muñoz
Antes de la muerte de Daniel Muñoz, Manzanares le dijo que quería un bien de él “pero pagándoselo. Muñoz se mostró sorprendido, porque no sabía a que bien me refería o cuanto le podía significar de pérdida. Por eso, le dije que quería mi oficina, me refiero al inmueble de calle 9 de Julio 161, que es mi estudio, y 9 de Julio 163, la planta alta, que es mi casa, en Río Gallegos”.
Cómo se acordó el precio fue llamativo: “Hicimos una especie de juego, en el que cada uno tenía que poner un precio. Jugué con el teclado de mi computadora y le dije $1.000.000 a pagar en 30 cuotas. Ese inmueble estaba a nombre de Cayuqueo, ahora está a nombre mío. Daniel me dice cuánto le podía pasar en blanco y le respondí USD 500.000. USD 250.000 por cada unidad. Quiero decir que el precio real fue de $1.000.000, que fue un precio de amigo. En toda esa negociación, estuvo presente Carolina».
El auto que pidió Néstor Kirchner
A cambio de esa venta, Muñoz hizo un pedido especial, «me dijo que volvía el VW Passat, que era mío, y se lo había comprado a Muñoz. Es el Passat que secuestraron en el garaje de Pedro Rivera. Cuando Daniel me pidió el Passat, entendí a que se refería, porque tenía todo un simbolismo ese auto. Ese fue el primer auto que Kirchner le pidió a Daniel que comprara para sus primeros movimientos en Buenos Aires, en el año 2003. Daniel llevaba en ese auto a Kirchner a hacer todo”.
«Corruptor de almas»
Entonces se refirió al ex secretario de Néstor Kirchner como “un corruptor de almas, entre ellas la mía. A él no le interesaba los dividendos, él copió el plan estratégico de Néstor Kirchner. En el año 2016 dos meses antes de su fallecimiento, Muñoz me envía un mensaje de texto, pidiéndome que no lo abandone y que lo perdone. Lo llame por teléfono y me pidió que viaje. A los pocos días viajé a Buenos Aires, lo visité en su casa. Allí me explicó todo lo que había sucedido con los Panamá Papers. No me contó en detalle, me dijo que había comprado un montón de propiedades y que había cometido el error de ponerlas a su nombre”.
En ese momento apareció en escena el ex secretario privado de Cristina Kirchner, Isidro Bounine “él iba a venir a ayudarlo, le iba a pagar a alguien de los medios para que la noticia pase lo más desapercibida posible».
Bolsos a la casa de la madre de Néstor
En este tramo dio detalles de cómo movían la plata que llegaba a Santa Cruz en avión. “Fui buscarlo al aeropuerto de Río Gallegos a Muñoz, sabía yo a qué concurría y por ellos ingresaba a la pista de aterrizaje del aeropuerto con el automotor de mi propiedad que se caracteriza por tener un baúl muy amplio. Ingresado a la pista estacionaba mi auto junto al Tango 01, cuyo piloto era Sergio Velázquez, esperando que Muñoz bajase. En algunas otras oportunidades Muñoz aterrizaba en un hangar a doscientos metros de la pista principal con un avión privado”.
El relato continuó. Una vez aterrizado Manzanares dijo que le acercaban de la bodega del avión o desde arriba de la cabina “dos valijas grandes que se colocaban en el baúl de mi auto al cual subía Muñoz. Iniciábamos un trayecto desde el aeropuerto hasta la casa donde vivía la madre del Dr. Kirchner en la calle 25 de mayo. Llegados a la puerta del domicilio, yo detenía la marcha, Muñoz bajaba, descargaba las valijas donde presumo que había dinero e ingresaba a este domicilio. Algunas veces le era abierta la puerta por alguien de su interior, y otras veces Muñoz poseía las llaves. Yo permanecía dentro del auto por aproximadamente 30 minutos esperando a Muñoz,. Muñoz salía a veces con una mochila y otras veces con un bolso que contenían dinero, que contenían 2 millones de dólares aproximadamente. Subido al auto él hacia una llamada telefónica informando que ya estaba cumplida la misión”.
Después de ese recorrido, Muñoz visitaba rápidamente a sus hijas, y despues iban a una oficina donde “Daniel dejaba esa mochila o ese bolso en el armario. Luego regresábamos al aeropuerto. Realicé esta dinámica entre cinco o seis veces, luego de que yo le comentara a Muñoz mi temor por un posible robo, no me convocó más. Entiendo que una vez que cese en esta tarea fui reemplazado por Roberto Sosa que era quien las realizaba desde antes. Estimo que lo que invirtió Muñoz en el exterior es mucho menor a lo que invirtió en el país. Estimo que la fortuna en este país ascendió aproximadamente a 130 y 150 millones de dólares”.