De un lado encontramos, más poder a UALA, un gremio de pilotos enfrentado con Pérez Tamayo
Cristina Kirchner oficializó que la Unión de Aviadores de Líneas Aéres ya tienen personería gremial, un resolución que los pone en igualdad de condiciones con APLA. Desde diciembre, Austral viajará a destinos internacionales, un plan de vuelo reservado para el gremio que realiza «boicots encubiertos».
También la Presidenta estuvo durísima contra los gremios aeronáuticos
Les dijo que no los quiere enfrentar sino «convencerlos de que trabajen». Habló de un boicot encubierto, defendió a Recalde y tuvo tiempo para criticar al gobierno de Macri por el traspaso del subte.
FIRME RESPALDO. Cristina avaló la gestión de Recalde en Aerolíneas Argentinas.
Cristina Kirchner inauguró un hangar para Aerolíneas Argentinas y estuvo más dura que nunca luego de los conflictos que se desataron con los gremios de los controladores aéreos y los pilotos, que hicieron que se suspendieran vuelos.
«La cuestión no es enfrentar a nadie, es convencerlos de que trabajen, nada más que eso», dijo, y agregó: «No hay que pelear, no hay que confrontar, hay que persuadirlos de que tienen que trabajar todos los días para levantar cada día más la línea».
La Presidenta habló de un «boicot encubierto», al que describió como acciones que no son «declaradas y abiertas», sino que se manifiestan en «vuelos que no salen». Afirmó que eso «viene de la época de Marsans», y con un tono enojado djio: «Hacen lo mismo que se hacía cuando se vaciaba la empresa, con un gobierno votado democráticamente, que defendió la línea de bandera». Luego se refirió a la frase «Aerolíneas somos todos» y opinó: «Ahora parece que Aerolíneas son unos pocos. Yo no quiero que sea asi, quiero que Aerolíneas sea de los 40 millones de argentinos».
Cristina siguió apuntando contra los gremios al remarcar los altos salarios que cobran. Citó uno por uno los sueldos promedio de cada uno de los gremios. Iban desde los 11 mil pesos a los 38 mil por mes. Los que menos ganaban, los trabajadores de atención al público, que hacen el check in en el aeropuerto, fueron calificados como «los que son agredidos porque hay cenizas o porque a algún piloto se le ocurrió no volar«. A los demás los describió como los que «hacen cosas de atrás» y «nunca les pasa nada».
«A Mariano Recalde no lo puso el Espíritu Santo, lo nombro esta Presidenta«, dijo Cristina en defensa del titular de la empresa, cuestionado por los gremios. Lo apoyó al decir que «la Aerolínea sigue siendo deficitaria, como lo son la mayoría de las aerolíneas del mundo» pero que «ha hecho una reducción notable del déficit al año 2010 en un 48 por ciento». Criticó además que para algunos «pareciera ser un pecado tener menos de 40 años». «No sé si hablan de envidia aquellos que tienen más de 60», agregó.
Muy ofuscada, Cristina habló de un extraño caso de colitis simultánea y contó que durante un vuelo un piloto acusó al Estado por la falta de comida para los pasajeros, cuando el problema era de otra índole. «Sentí mucha vergüenza como argentina y también un poquito de desilusión ante tanta poca correspondencia por lo que hemos logrado en estos 8 años de gobierno», dijo, y les avisó a los que la escuchaban: «Defiendan lo que es de ustedes, porque el dia que se esto se acabe a los primeros que se llevan puestos es a los trabajadores argentinos. Yo voy a seguir viviendo y comiendo«.
«Les pido a todos el máximo de colaboración», continuó Cristina, y advirtió: «Esta Presidenta no es eterna ni lo quiere ser. No sea cosa que en algún momento en lugar de doña Rosa venga alguna doña Elena y piense que el Estado es muy mal gestionador y la historia termine como empezó».
El segmento del discurso dedicado a Mauricio Macri fue también el más emotivo. «Cuando escucho no puedo hacerme cargo del sute por esto…» arrancó, para seguir, entre lágrimas: «¿Y yo? Se me murió mi compañero de toda la vida, tenía dos hijos hechos pelota y tuve que hacerme cargo de la Argentina y salir a trabajar». Luego continuó: «Muchas veces veo a mis hijos mal y sin embargo tengo que salir y poner la mejor sonrisa y dar esperanzas a todos los argentinos, porque es lo que esperan de su presidenta», y aseguró que cuando ve que hay conflictos en Aerolíneas se siente «casi una estupida».
Cristina afirmó que hasta ahora hubo un «permanente negociar para que no cayera un vuelo, no se juntara la gente en Ezeiza» y aseguró: «Privilegiamos al usuario a costa de muchas cosas». En ese sentido indicó que la empresa «tiene que servirles a los 40 millones de habitantes y no a un puñado que se cree con privilegios sobre los demás». «¿Este fin de semana largo se romperá algo?», se preguntó, y se respondió: «Espero que no». «Demuéstrenos a los argentinos que Aerolineas Argentinas somos todos», cerró.
Mientras tanto que, Carta Abierta respaldó la gestión de Recalde, en Aerolíneas Argentinas
El grupo de intelectuales difundió un nuevo manifesto donde advirtió sobre «viejas fuerzas reaccionarias» y repudió el crimen del militante del Mocase ¿contradictorio, no le parece? ya que la Presidenta es quien decide este modelo multinacional y de saqueo.
Recalde participó en un encuentro que el grupo de intelectuales organizó el último sábado en la Biblioteca Nacional y ante los presentes defendió su lugar en AA: «Los nenes redujimos el déficit». «¿A quién se le ocurre tomar una medida de fuerza una semana después de las elecciones?», preguntó Recalde en clara alusión al sindicalista Ricardo Cirielli.
El espacio de reflexión que conducen el sociólogo Horacio González y el filósofo Ricardo Forster señaló: “Ahora hay que demostrar entre todos que cuando decimos que hay cosas que faltan no sólo se trata de problemas conocidos o deducibles de lo que quedó pendiente de un trayecto anterior. Lo que falta no es un problema de restas y sumas, sino de imaginación política”.
Además del respaldo a la línea de bandera local, el grupo repudió el asesinato de Cristian Ferreyra, el militante del Mocase asesinado hace una semana en Santiago del Estero víctima de «la avidez de un capitalismo depredador, la irresponsabilidad de inescrupulosos empresarios (…) y a una epistemología completa de negocios que mantiene cerrado el acceso democrático y posible a la tierra rural y urbana».