Los investigadores todavía buscan a dos prófugos. El hijo del intendente fue liberado por la muerte del sargento.
Para la familia de José Eduardo Aigo, el policía asesinado durante un confuso episodio en Junín de los Andes, hay contradicciones entre las versiones del compañero del agente muerto y de Juan Marco Fernández, el hijo del intendente. Por eso, los abogados querellantes adelantaron que pedirán la reconstrucción del hecho.
Así lo adelantaron los letrados, María Adad y Gustavo Lucero, en una conferencia de prensa, según publicó el diario Clarín. Mientras avanza la investigación por el tiroteo seguido de muerte, la Policía busca a dos prófugos que escaparon esa madrugada del ataque al agente.
Pese a que todavía no se logró determinar con exactitud qué fue lo que ocurrió sobre la ruta 23 en el paraje Pilo Lil, Lucero aclaró que la principal hipótesis está vinculada al narcotráfico aunque no brindó detalles específicos.
En tanto, el abogado explicó que hay diferencias entre lo que plantean los testigos del tiroteo sobre la secuencia. Por un lado Fernández aseguró que se escondió entre los asientos cuando sintió el primer disparo. Por el otro, el oficial Pedro Guerrero que trabajaba con Aigo, planteó que el hijo del intendente realizó movimientos rarospara distraer al hombre baleado y que brindó detalles que no podía conocer por su ubicación en la camioneta.