No obstante es amigo el conductor televisivo del chanta sectario y abusador:
Claudio María Domínguez y su «procaz» defensa del escrache
Así definió el propio conductor el estilo con que respondió a las preguntas del líder del movimiento anti secta, Pablo Salum.
El conductor de “Hacete cargo”, Claudio María Domínguez, sigue sin bajarle el tono al escándalo del viernes en la Feria del Libro, cuando fue escrachado por el movimiento anti secta por sus vínculos con el “líder espiritual” Maestro Amor, acusado de abuso, y ahora se la agarró con Pablo Salum, líder del grupo que lo enfrenta.
Domínguez quedó mal el viernes cuando eligió responderle a Salum, que le preguntó qué opinaba del Maestro Amor, con insultos y frases de mal gusto: «No me rompas las pelotas, estoy contestando. La Justicia no lo condenó, ¿quién soy yo para condenar la paja (sic) ajena, la viga en el culo propio? Ahora, si yo lo condeno, es porque tengo el culo dilatado. La idea es: sé una persona que perdone. Si la acusación fuese verdad, nadie escapa del karma”.
El escándalo estalló y Domínguez se escondió diciendo que estaba en Salta. Pero fue obligado a dar la cara y lo hizo en el programa de Viviana Canosa “Más Viviana”, por Canal 9. Pero en lugar de mostrarse arrepentido, redobló la apuesta. Ni la conductora podía creer lo que estaba escuchando.
Domínguez, sacado, afirmó: «Tengo derecho a ser procaz. Culo dilatado. Si dije culo dilatado. Cuando era chico me la pasaba mirando las tetas de La Coca Sarli. Culi, teta, culi, teta».
No contento con eso se tomó la atribución de desearle siete tumores a quienes lo habían escrachado. «Be happy. Si, Japi, Japi para todos», concluyó ante la impaciencia de Canosa que sólo quería terminar con el reportaje.
Escrachado y sacado
Claudio María Domínguez tuvo un encuentro poco feliz con algunos de sus detractores.
Puede que sea uno de los gurúes pseudo espirituales más consultados y seguidos, pero eso no libró a Claudio María Domínguez de tener detractores. El conductor de «Hacete cargo» presentó su nueva obra en la Feria del Libro, donde fue increpado y escrachado por familiares de personas que fueron damnificadas por su antiguo socio, el «Maestro Amor» de La Rioja.
«Tanto que hablás del karma, si violaran a tu hija ¿qué opinarías? Y qué opinás del Maestro Amor? Antes eras amigo de él, y hay un montón de gente destruida a nivel familiar», espetó uno de los detractores de Domínguez. «Totalmente corazón…», empezó a contestar el gurú con su habitual parsimonia y voz suave y melíflua.
Pero el conductor no pudo terminar de hablar y se sacó: «¡No me rompas las pelotas, estoy contestando!», bramó, para después pedir que le retiraran el micrófono a la persona que había hecho alusión al polémico Maestro Amor, según el Blog LMKShow.
Acto seguido, Dominguez recuperó su pose beata e iluminada. «La Justicia no lo condenó, ¿quién soy yo para condenar la paja ajena, la viga en el culo propio? Ahora, si yo lo condeno, es porque tengo el culo dilatado. La idea es: sé una persona que perdone. Si fuese verdad, nadie escapa del karma», concluyó.